Nunca queremos hacer daño, pero a veces lo hacemos. A veces tenemos que tomar decisiones dolorosas que nos dejarán para siempre un arañazo en el corazón. Hacemos sufrir y a la vez sufrimos por el daño que hacemos. ¿Qué hacer entonces?
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1 comentario:
Si ya lo decía la canción: Cambia, todo cambia.
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